Celebra

Cada día que pasa y cada año que cumplimos es un regalo que la vida nos brinda para crecer y mejorar, es una oportunidad perfecta para empezar algo nuevo o cambiar viejas costumbres, dejar atrás lo que no nos aporta valor y dar la bienvenida a todo aquello que nos llena y engrandece.

Envejecer nos permite aprender a través de todas las experiencias que vamos viviendo y como resultado de este aprendizaje conseguimos madurar lo cual nos ayuda a ver las cosas con otra perspectiva y a evaluar cuanto nos sucede de una manera distinta y con más criterio.

De esta manera vamos a ser capaces de considerar tantas posibilidades y en consecuencia se nos van a presentar nuevas oportunidades ya que nuestra disposición y el estar abiertos a descubrir y conocer diferentes opciones nos llevará a experimentarlas realmente.

Dicen que la vida es de los valientes, de los que arriesgan y de los que se atreven a soñar, aquellos que creen que todo es posible por lo que cualquier situación que se les plantee es buena para atreverse aunque esto suponga equivocarse y volver a intentarlo de nuevo.

También se dice que más vale haberlo intentado y fracasar, que arrepentirnos y quedarnos con la incertidumbre por no saber qué pudo pasar, ya que al intentarlo siempre vamos a conseguir algo, ya sea una lección, un aprendizaje o en el mejor de los casos aquello por lo que nos atrevimos.

Y es que la decisión depende únicamente de cada uno de nosotros, pues como dijo Henry Ford ”Tanto si crees que puedes, como si crees que no puedes, estás en lo cierto”.

Por esto no tiene sentido estancarse en el pasado limitante ni vivir temeroso por el futuro incierto, es mejor mirarnos en el presente para valorar lo que somos, agradecer lo que tenemos y ver cada momento como lo que es, el tiempo que ya no vuelve y que si no se aprovecha se pierde.