Atracción por atención
- Delia Morales Ortega
- 21 mar 2016
- 2 Min. de lectura

Según esta ley si queremos atraer algo a nuestra vida lo más importante o fundamental es centrar toda nuestra atención en eso que deseamos para que de alguna forma llegue a nosotros.
Para ello no solo tenemos que desearlo, sino que además tenemos que imaginarlo, pensarlo y visualizarlo como nuestro y así todas nuestras acciones tendrán como foco eso que realmente queremos conseguir.
Parece algo sencillo lo cual no quiere decir que solo con nuestra imaginación vamos a obtener todo y cuanto deseemos pues no se trata de magia o suerte, sino más bien de ser conscientes de qué es lo que queremos y qué tenemos que hacer para alcanzarlo.
De alguna forma, muchas veces sin darnos cuenta, el visualizarnos siendo de alguna manera o teniendo algo que realmente queremos nos da el empuje que necesitamos para que nuestra actitud sea la más adecuada a la hora de ir a por ello.
Y así parece ser que de repente empezamos a encontrar a nuestro alrededor eso por lo que estamos interesados y un sinfín de cosas relacionadas con el objeto en cuestión. Lo cierto es que todo eso no aparece de forma casual e intencionada sino que siempre ha estado ahí junto con otro sinfín de cosas que ahora no percibimos porque nuestra atención ha decidido posarse en aquello que nos interesa.
Por lo tanto, es evidente que centrando nuestra atracción en aquello que nos interesa de alguna forma lo atraemos pero puede resultar paradójico el hecho de que también conseguimos atraer aquello que a toda costa tratamos de evitar incluso si ponemos todo de nuestra parte para esquivarlo en cierta manera estamos dedicándole nuestra atención y así estamos dándole la importancia que tratamos de negar.
En definitiva, debemos prestar más atención a aquello sobre lo que queremos provocar atracción, sin dejar que esto se convierta en una obsesión pues ocurre muy a menudo que atraemos lo que queremos aunque no tengamos la intención.
Comments